Ser una moderna

25 de julio de 2022

Ser una moderna no es tarea fácil, sobre todo si ya no tienes 20 y has de compatibilizar la modernidad con mil tareas diarias que te sobrevuelan como proyectiles, desde la mañana a la madrugada. Porque ser moderna implica sacrificios y no es lo mismo, por ejemplo, agujerearte la oreja y solo procurar que la peluquera no se enganche cuando te echa las mechas balayage y luego vivir por y para tu nuevo piercing, que sobrevivir con él en mitad de la jungla, pasar dos horas diarias hablando por teléfono en la oficina con la oreja plancha malherida, tratar de que el bebé no se te enganche a la oreja para dormirse y te la arranque de cuajo como Van Gogh, que la niña no se lleve el piercing por delante junto a tres mechones de pelo cuando te obliga a jugar a peluqueras y tú accedes con tal de que se calle y te deje ver un por un ojo el informativo, o tratar de dormir al menos tres de las 5 horas disponibles sin apoyar la oreja maldita y no pasarte media noche maldiciendo en arameo.

Yo personalmente siempre he sido una moderna y no voy a dejarlo ahora, que si he tenido valor de llevar las gafas de sol tipo John Lennon de cristal de espejo, el pelo color violín, las superposiciones imposibles o los collares de bolas de plástico fucsia, soy capaz de cualquier cosa.

En el tema piercing, ya tengo cinco en una oreja para disgusto de mi padre, que dice que eso es de carcelarias -en realidad para mi padre todo es de carcelarios, los tatuajes, los piercings o las uñas muy largas no tengo muy claro qué cárceles son esas- porque no es un moderno y no entiende que la nueva Marta Chávarri los llevaría a pares.

He de confesar que luzco 5 pero que me he hecho 7, viniéndome siempre arriba, que no se diga, pero el malvivir de la no cicatrización ha sido más fuerte que yo y una noche de violencia callejera de no pegar ojo, opté por quitármelos y poder apoyar la cabeza en la almohada y ser menos moderna pero no tener la cara de Lindsay Lohan entrando en rehabilitación. Pero claro, la cabra tira al monte y después del descanso, una echa de menos ser una moderna y quiere volver al mundo del insomnio y las perforaciones. Y vuelvo al bucle. Y así vivo.

Pero no sólo de pìercings vive el hombre. Que si se llevan las uñas flúor, ahí voy yo la primera, aunque tenga las manos blancas como monja de clausura y luzco las uñas rosa cegador -carcelario también, según mi padre- que ni me favorece ni nada, pero es sentirme moderna y venirme arriba.

Que se llevan los collares dorados, yo, cargada como la mujer de Gil o M.A., Mr T para los millenials, las gafas grandes, yo, las gafas pequeñas, yo también, los mocasines, las Martins, los pañuelos en el pelo, los ganchillos, el vichy, los bolsos shopper y los axilares made in año 2000, las medallas, los pendientes Verbena, los capazos aunque te dejen el hombro en carne viva y ahora a mis 43, lampando estoy por una riñonera para poder ir al trabajo como Omar Montes o el aparcacoches de la playa con mis uñas fluorescentes y la oreja latiéndome desde 2020. O sea que igual el asunto ya se me ha ido de las manos, pero es que ser una moderna no se elige, se nace. Y se sufre. Pero… ¿y lo bien?

¿Qué me cuentan? ¿Le dais a la modernidad o preferís la buena vida?

13 Comentarios

  1. Mamagnomo

    Yo me hice dos de un tirón y mi marido al verme me dijo “te has perforado!”y orgullosa lucí un par de semanas una oreja maltrechamente dolorida y roja. La vida me puso en mi sitio y mi hijo ingresó en el hospital y me tocó dormir siempre del mismo lado aplastando mis circonitas con las que soñaba desde que vi nada es para siempre allá por 1999.
    Obviamente me quité el sufrimiento de la oreja que bastante tenía ya con lo de mi hijo que también se solucionó y ahora soy feliz siendo vintage, la verdad.

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    • Flor Enjuto

      Jajajaja, tú no eres vintage en todo caso, clásica, como Lourdes Montes o la Preysler que son bellesssas también!

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      • Ana Memole

        La riñonera depende de la época en la que te pille, pareces un yonki aparcacoches, o una Kardashian. Muy confuso todo…

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  2. María José

    Pues a mí los agujeros que me hicieron de bebé estaban hechos de tal forma que no me podía poner los pendientes de gancho, así que haciendo acopio de mucho valor me los hice nuevos hace 5 años, pero en el confinamiento estuve sin ponerme pendientes y se me cerraron, así que me los he tenido que volver a hacer y ya, de paso, me he hecho otro más arriba y como los que bebé no se me han cerrado, pues tengo tres en una oreja y dos en la otra y acabo de descubrir que Shein tiene unos pendientes monísimos y hoy me ha llegado un cargamento 🙊🙈 con riñonera y capazo incluidos y una sombra topper para los ojos y estoy deseando que baje un poco la caló para poder maquillarme y estrenarla 😅😅😅

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    • Flor Enjuto

      Maremía! Somos almas gemelas!! jajajjaja

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  3. Carmen

    Y qué no se diga!! A mí me molas como ese pedazo moderna que eres y mucho. Y sí, se nace tirando al monte y eso se nota en todo jajajj pero oye, que yo ya no estoy para vivir de otra manera y pensando en tatuarme una cabra estoy jajajj

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    • Flor Enjuto

      Haces muy bien!! Seguro que te quedan genial!!

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  4. Sonsoles

    Yo soy anti moderna y lo sabes, pero en tí queda todo tan ideal que me lo pienso y todo! Además en tu modernez aceptas mi look loca de los gatos, por eso entre otras cosas siempre bien al look cárceles jajaja

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    • Flor Enjuto

      Tú, siempre bella!! Desenfadada y libre, en todo caso, como nuestra querida Winona en sus años mozos. Loca de los gatos somos todas, me temo jajajjajaj

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  5. SUSANA, DESDE ITALIA CON AMOR jaja

    Uyyyy yo estoy con tu padre jajaja uñas de colores clásicos, osea rojo y burdeos , piercing y tatuajes ni uno, riñonera nooooooo por favor.. jajaja bolsos grandes tipo birkin, si gracias, ponme una docena..

    Yo vivo con mi ropa de niña buena, mis mesas y mis ñoñerias varias 😂

    Peroooooooooo me encanta ver a mis amigas modernas, solo que yo con ciertas cosas no me veo y no lo voy a intentar ahora… El mundo está guay porque es diverso, si todos fuéramos iguales menudo aburrimiento… Besosss

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    • Flor Enjuto

      Jajajaj, tú siempre estilosa, clásica y estupenda!!! Fíjate que cambiar el tono de las uñas es lo que más me ha costado. Yo soy de rojo, rojo vino y como mucho negro, pero todo es ponerse! Y el maquillaje igual, sota, caballo y rey, a veces innovo y aunque me digan que estoy guapita me siento súper incómoda y vuelvo al redil. Pero ahí acaba todo, en el resto me encapricho de casi cualquier nueva tendencia. Bueno, que me pegue y que me conquiste el corassonssito. La culpa la tiene la suscripción a la Vogue y cia. Aunque ojo, ya he comprado 3 veces el Hola.

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  6. Anónimo

    Con que gracia lo cuentas todo y como la vida misma .. me encantan tu blog

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