Futuros distópicos

30 de mayo de 2022

No sé a los vuestros, pero a mis hijos les encanta hablar del futuro. Que si una va a ser maestra pero de las buenas que no mandan nunca deberes y aprueban con un 4 a todos los que le caigan bien o veterinaria pero sin operar ‘que me da mucho asco la sangre’ o ‘cantante de música en inglés como Kate Perry’ -dios libre al mundo de esto último y a Katy Perry de escucharlo- y el otro que si ingeniero o científico para poder hacer explosiones -no tengo muy claro dónde ha oído lo de las bombas científicas- o minero, algo que desde pequeño le ha entusiasmado, aunque cada vez menos porque ya le he advertido del riesgo de morir a los 50 de neumoconiosis severa por aquello de que me parecía más fácil hablarle de una muerte joven, que de la precariedad laboral del sector y de que no hay necesidad alguna de verme yo llevándole el bocadillo a Asturias o a la mina de San Esteban como la madre de Antonio Molina.

La cuestión es que a los pelirrojos les encanta fantasear con todo lo que van a hacer y no hacer cuando sean mayores y yo les escucho como quien escucha de llover, con la de plancha y estrés que tiene una, salvo cuando de algún modo entro yo en sus planes de futuro y la cosa empieza a enturbiarse.

“Mamá, yo nunca, nunca, te voy a llevar a un asilo, pero nunca” me soltó un día el pelirrojo cuando estábamos comiendo, no sé si a modo de demostración de amor maternofilial o de amenaza velada porque le estaba obligando a comer lentejas y fue todo más en plan ‘fíjate desagradecida que no te voy a llevar al asilo y tú dándome lentejas, ojo, que este tema está sobre la mesa e igual me lo replanteo’, que vete tú a saber. Entonces la pelirroja, loca por dejar al hermanísimo en mal lugar entra en acción y suelta “Pues claro que no, yo nunca dejaré que te metan en un asilo, ni a ti ni a papá ni aunque el niño sí quiera”. / “Pero qué dices si yo no quiero y no la voy a llevar ni aunque esté muy muy vieja, ni dentro de diez años”.

Ni cuando esté muy muy vieja dentro de diez años. Grasssias. Y yo en shock, comiéndome dos barritas bimanán creyéndome en mitad de la operación bikini de jovenzuela, con mis incipientes patas de gallo pero con mis looks veraniegos esperándome, asistiendo a esta conversación de cuervos en las que no sólo se pone sobre la mesa la inclusión en asilo sino el hecho de que en diez años seré vieja muy vieja y con opciones de ingresar en un asilo.

Entonces la lucha de quién es mejor hijo continúa. “Y además, cuando no pueda andar yo le voy a comprar una silla de ésas que son como una moto para que pueda ir al cine”. A ver la idea de ir al cine con el bono dorado me seduce, pero quién ha dicho que no pueda andar, pero qué clase de mierda de conversación es ésta. / “Qué tonta eres, si esas sillas las regalan con los tapones de las botellas – ojo al dato- y además, mamá no sabe conducir, así seguro que mata a alguien, mejor de las de empujar y la empujo yo que como iré al gimnasio seré súper fuerte”.

O sea, vieja viejísima, sin asilo pero sin poder andar, presunta homicida kamikaze y sin motosilla de las que ‘regalan’ con los tapones, todo esto antes del postre y como supuestas demostraciones de amor.

“Mamá, – me dijo otro día la pelirroja- he pensado en comprarle la casa a los vecinos cuando sea mayor y así podremos estar juntas para siempre y sólo tendrías que subir a mi casa o yo bajar a ésta si necesitamos algo, ¿no es una gran idea? Y así si tengo niños, los puedes cuidar tú mientras yo trabajo o lo que sea y si me enfado con mi pareja, me vengo aquí”. Por supuesto a estas alturas yo ya tengo los ojos en blanco, pensando en los minipelirrojos subiendo y bajando escaleras y con la pelirroja porfiriendo gritos por el ojopatio y no puedo más que calcular un plan de pensiones y cuánto me costaría una huida a Panamá.

Pero el pelirrojo sube la apuesta y dice “pues yo me voy a quedar aquí para siempre y he pensado en meter mi cama en tu cuarto, mamá, y si me caso y mi mujer quiere venirse también, que se venga, así dormimos todos juntos y si tengo un bebé podemos cuidarlo todos por las noches”.

“Pues si el niño se queda, yo me quedo también, que tiene mucha cara y yo ya lo dije antes que nací primero” -es verdad que la pelirroja ya amenazaba con esto de pequeña pero pensé que a los 12 ya tendría sentido común. Pues no. / “Pues nos quedamos todos, igual cabemos todos en el cuarto de mamá – dice el pelirrojo conciliador- y así tus hijos y mis hijos pueden dormir juntos en la cama grande y… “

Yo ya no pude escuchar más, imaginándome a todos en mi habitación, como en la posguerra, con el páter roncando, con la versión adulta de los pelirrojos, una chillando en 3 idiomas y el otro, un friki malo de los nervios, sus parejas y sus hijos, todos hacinados, pegando voces y meciendo minipelirrojos llorones como si no hubiera un mañana. Y casi colapso.

Vamos, que desde hoy mismo pienso hacer lentejas todos los días, a ver si el tema del asilo vuelve a ponerse sobre la mesa y hay suerte y me ponen en lista de espera desde ya.

17 Comentarios

  1. loly

    Qué risa por favor. Eres la bomba. Me haces reir de buena mañana

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    • Flor Enjuto

      ¡Muchas gracias! La vida misma…

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    • Eli Cáceres.

      Mejor asilo, pero en una playa caribeña. Tenemos que hablar sobre el sueldazo para toda la vida o un euromillones.

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      • Flor Enjuto

        Lo merecemos. El euromillón, digo. jajaja

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  2. Carmen

    Jajajajjj Mira de que manera has vuelto un lunes que parece sábado. Esas conversaciones son dignas de grabar y dejarlas caer cuando sea. Luego viene aquella de, yo preguntando, y vosotros le aguantaréis esto a vuestros hijos!? La contestación no tiene desperdicio, un no rotundo. A mí me tarda el momento de ser libre de nuevo y volar, tan rápido que se me caían los años al suelo y así poder volver a ser joven. Y con lo que sé…pues ya ni te cuento. Beso Flor

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    • Flor Enjuto

      Yo quiero volar aunque sea vieja. Ya me veo en Benidorm con mi traje de costadillo bailando pasodobles, jajajja

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    • Trini.

      Madre mía, en mi casa mis hijos tuvieron la misma conversación hace tiempo, igualita vaya. Buscando asilos estamos ya jajaja

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      • Flor Enjuto

        Cría cuervos…

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  3. Sonsoles

    Escapemos juntas que estos además dicen que ni novia ni nietos que los aguante a ellos por su cara bonita hasta que comience la calvicie que nadie hace de comer como una madre, terror!

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    • Flor Enjuto

      Maremía…

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  4. Bego

    Jajajajajaja,jajajajaja,jajajaja,no puedo jajajaj me lo he ido imaginandomtodo mientras lo leía,jajajaja es para salir corriendo o como tú dices que te pongan ya en lista de espera que mejor estarás con una copa de anis y jugando al chinchón.

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    • Flor Enjuto

      Lo veo, jajajaja

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  5. rosamaricoca@outlook.es

    ¡Que hartón de reir! Por un momento he imaginado a los posibles mini pelirrojos como los traviesos hermanos de Brave. Creo que lo de la huida a Panamá no es una idea tan descabellada….

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    • Flor Enjuto

      A que no? Yo aquí no me quedo…

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    • SUSANA

      Madre miaaaa.. jajaja Desheredalos antes, para que no tengan derecho a un trozo de tu cuarto ..

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  6. Ana Memole

    Dice mi madre que si vas a las Hermanitas de los Pobres como voluntaria, a echar una manilla planchando y demás, luego tienes preferencia para estar allí de viejita, y que están los yayos que da gloria verlos. Ahí dejo el dato…

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    • Flor Enjuto

      Cuándo te va bien que vayamos a apuntarnos?

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